Continúa Winick la trama iniciada en el número anterior, aportando detalles de los planes de Hermano Sangre, de manera correcta y entretenida, con buenas escenas, y manteniendo el interés en todo momento, la trama avanza y el asunto de los durmientes es bastante interesante, y con un continuará bastante bueno.En el aspecto del tratamiento de los personajes se aprecia un toque a lo Mark Millar, guionista caracterizado por dotar de un carácter muy chulesco a los personajes que trata, este estilo es usado por Winick, que si bien no lo exagera tanto como el propio Millar, se aprecia bastante en la forma de hablar de los personajes, especialmente de Grace y Metamorfo.
En cuanto al dibujo, volvemos a tener este mes al dibujante invitado Chriscross, que sustituye en esta saga al dibujante titular Tom Raney.
El estilo de ambos es parecido, por lo que el cambio no es demasiado brusco, más bien al contrario. Personalmente, prefiero a Raney, ya que si bien es cierto que su narración es mejorable, sus dibujos transmiten mucha elegancia, aunque que la narración de Cross es mejor que la de Raney.
En definitiva, una serie de superhéroes que no pretende ser más que eso, y de verás que lo consigue, entretiene desde la primera página, tiene diálogos con mucha chispa, buen dibujo (aunque espero que el cambio de dibujantes no se produzca cada tan poco tiempo), personajes muy interesantes...
Puntuación: 8/10
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